La salud mental se refiere a un estado de bienestar en el que un individuo se da cuenta de su propio potencial, puede hacer frente al estrés normal de la vida, puede trabajar de manera productiva y fructífera, y puede contribuir positivamente en su comunidad. Factores como las condiciones estresantes de trabajo, la discriminación y la exclusión social pueden afectar la salud mental. Por otro lado, las demandas laborales adecuadas, la libertad de decisión y el apoyo social de colegas y supervisores promueven la salud mental.